«GRITOS DE BARRO, LLAVES DE MEMORIA» Espacio Nexo990. Monzón de Campos. Acción participativa, microesculturas e instalación audiovisual con sistema interactivo. Dentro de la exposición colectiva TIERRA AGUA FUEGO. Junio 2020.
TRABAJOS < 1982-1996 > ver periodo
TRABAJOS < 2003-2020 > ver periodo
«El cristalino del besugo» LA CONSTRUCTORA-12. pieza escénica. 1988
Alejandro Martínez Parra
Si no me conocen, probablemente les resulte extraño asociar la naturaleza de la colección NOMBRAR HUMANOS al tipo de proyectos que he venido realizando desde los años ochenta. Intentaré sintetizar lo más posible estos años de mi relación con la práctica del arte. Lo hago para que puedan «mirar» este proyecto de dibujo y escritura desde una perspectiva más amplia que les aporte textura y, quizás, mayor sentido.
Inicié mi formación en Ciencias de la Educación en la Complutense de Madrid. En aquellos años el interés por los procesos educativos y especialmente cuanto tenía que ver con las técnicas de desarrollo en creatividad, corrió en paralelo a mis primeras experiencias en arte, en concreto en el mundo de la escena, el cuerpo y la acción. Formé parte del grupo Corps que dirigía Pedro Garhel y estuve vinculado a los primeros años del Espacio P y de Poisson Soluble, otro espacio inédito que activó principalmente, entre otras personas, la artista Victoria Encinas.
En 1985 fui socio fundador de A UA CRAG, un colectivo que durante once años y desde Aranda de Duero, desde el espacio galería y la nave de producción, desarrollamos proyectos de obra para museos y centros de arte y proyectos de colaboración con grupos de artistas de otros países como Francia, Bélgica, Alemania,, Holanda y Canadá. El fondo de documentación de A ua crag está recogido en el MUSAC de León. Esta experiencia está suficientemente documentada por ejemplo a través del libro A UA CRAG que se editó a raíz de la exposición retrospectiva en 2003 en el Museo Patio Herreriano de Valladolid, cuando era dirigido por Teresa Velázquez, y cuyos comisarios y autores de textos fueron Victor del Río y Olga Fernández.
En 1988, junto a Rafael Lamata y Luis González, miembros ambos de A ua crag, creamos LaConstructora-12 dedicada a la exploración performativa y textual.
Desde mediados de los noventa a través de mi propio estudio de diseño empecé a ofrecer servicios profesionales en el ámbito de imagen corporativa, diseño editorial así como diseño y construcción de exposiciones temáticas al tiempo que seguía desarrollando proyectos personales de carácter híbrido y multidisciplinar.
Trabajar en la frontera del arte y al servicio de problemas y necesidades de personas, empresas e instituciones me ha aportado una experiencia extraordinaria. Mi propósito era -y sigue siendo- aprovechar al máximo lo realizado en campos como la escultura,, la escenográfica, música, lenguaje o plástica para aplicarlos, a proyectos «funcionales». Por citar un caso del que guardo un gran recuerdo tanto por la dimensión del reto, el proceso y los resultados señalaré el proyecto «Propaganda en Guerra«, realizado para la Capitalidad Cultural Europea de Salamanca 2002 en el qué con mi equipo habitual de colaboradores, pudimos concebir una potente exposición para mostrar más de cuatro mil documentos originales del Archivo General de la Guerra Civil. y hacerlo de un modo poco convencional aplicando conceptos, puntos de vista y estrategias que son más bien propios del arte.
Me gusta trabajar así porque sientes que estas proyectando alguna clase de conocimiento a ciertas necesidades; percibes que estás en el suceder «útil» de los acontecimientos…; y por el contrario también sabes cuando tu acción es de otra naturaleza y te retiras a un mundo interior, a veces indescifrable, incluso remoto o bastante excéntrico y solitario.
Creo que nombrar humanos posee el mismo espíritu con el que concibo los talleres «Pensamiento en el acto«, que son seminarios de trabajo creativo. Yo diría por tanto que nombrar es un proyecto extrovertido, en el que se celabra el ejercicio de la imaginación. Pero que hunde sus raíces en el jardín del arte; ese jardín que hemos ido cultivando cada cual con nuestras experiencias y conocimientos, nuestro contacto con la historia y las colaboraciones con otros artistas y mentes de gran sensibilidad.. Y desde ahí fluye al exterior con expontaneidad y, si me permiten decirlo, con alegría.
Ahora bien, nombrar se desarrollaba al mismo tiempo en un contexto más global y en paralelo a otros trabajos con diferentes registros. Para saber algo sobre ese contexto hemos hecho la pestaña de PROYECTOS RELACIONADOS. Concentra sobre todo los trabajos de carácter textual todavía inéditos: «Nodiarios«, desde 2007 y «NSCLLs» desde 2011. Así como otras pequeñas publicaciones: «Interrogantes Gigantes» o «Aprender las letras«, que iban surgiendo del proceso de Nombrar Humanos y que están vinculados a talleres de trabajo creativo con niños y adultos.
ALGUNOS PROYECTOS DE ARTE
Esbozaré a grandes rasgos algunos de los proyectos de arte en los que he estado involucrado estos últimos años y que sugieren en conjunto que mi forma de trabajar es muy abierta y bastante imprevisible pues enfoque, métodos y resultados derivan de las condiciones específicas que se establecen en cada caso. Esa imprevisibilidad es exactamente lo que busco, ya que el reto en torno a la incertidumbre es lo que precisamente aviva la mente, hace que la vida vibre y se abra la percepción.
Hay un proyecto que aprecio mucho porque creo que expresa bien alguno de los propósitos que me animan como artista. Se trata del proyecto-libro CEADUNAS TIOMANA. Surgió de una invitación en 2003 a colaborar en la celabración del centenario del centro Educativo en Aranda de Duero donde estudié de joven. Así que me pareció que lo oportuno era hacer un libro, un libro de artista, claro. Produje una edición del libro como si de un objeto se tratara y fabriqué una estantería que se expuso como escultura. Quien lo deseaba podía obtenerlo gratuitamente y llevárselo a cambio tan solo de responderme a algunas preguntas sobre sus sueños.
Entonces nacieron mis hijos y estoy convencido de que ellos son en el fondo las hélices de cuanto hice esos años y en concreto, los autores invisibles de Nombrar Humanos.
2010 a 2020
A comienzo de este periodo pude bajar la intensidad de los trabajos del Estudio y retomé la composición en música. Aparte de profundizar en aspectos pedagógicos, desarrollé entre otras cosas PPPRyN, un cuaderno de pequeñas piezas para piano de caracter didáctico y tres piezas sonoras encargadas por el artista Rufo Criado para acompañar sus proyectos de exposición.
En 2013, Javier Ayarza me invitó a participar en el proyecto LA CABRA SE ECHA AL MONTE, un festival de intervenciones de arte en Monzón de Campos. Durante los meses previos visité con frecuencia ese pequeño y singular pueblo de Palencia para tratar de conocerlo. Como resultado presenté el libro Libro de Aventuras, colección de textos, fotográfías, notas, dibujos y vídeos sobre mi experiencia de observación y descubrimiento.
En 2014 llevé a cabo en el LAVA, Laboratorio de las Artes de Valladolid, el proyecto PROPOSICIONAL, una idea que tenía en mente desde hacía muchos años. Durante dos meses me «encerré» en uno de los espacios del complejo, la sala 221, e invité a pasar conmigo la mañana, la tarde o el día entero a personas muy diferentes entre sí, artistas algunos y, otros, personas ajenas por completo al arte. El proyecto trataba de explorar desde cero una situación de posibilidad creativa y de conocimiento inesperado. Mi trabajo era enfrentarme a situaciónes para el descubrimiento. Y suscitar la oportunidad de hallar la estructura invisible de un proceso interior.
Este trabajo se puede ver el el enlace http://alejandromartinezparra.com/pre-posicional-residencia-artistica-en-lava-24-de-marzo-15-de-mayo-de-2014/
Durante el 2015 y 2016, exceptuando la elaboración de la pieza ¿Cuál es mi sonido? para LA CONSULTA -un proyecto interesantísimo en Madrid de Jaime Vallaure, Rafael Suarez, Teresa Del Pozo y Jesús Acevedo- me concentré en el diseño de un proyecto de Arte Educación en colaboración con el MEH de Burgos, al tiempo que revisaba trabajos antiguos relacionados con el sonido y la composición; en concreto rehaciendo y completando un libro de piezas para piano denominado «Mínimos«, aún inédito, que trata de una colección de pequeñas piezas a modo de poemas de interpretación muy subjetiva.
En 2017 los que fuimos miembros y amigos de A ua crag, fuimos invitados por Rubén Polanco a desarrollar una idea expositiva para El Huerto del Tertuliano, en el pequeño pueblo de Fuenteolmedo. De esa experiencia entrañable y memorable nació mi propuesta «TEMPO, cinco relatos audiovisuales sobre objetos que vibran u oscilan» una instalación audiovisual, poesía y objetos.
Un año más tarde, en 2018, Jaime Vallaure y Diana Delagado-Ureña me invitaron a concebir un proyecto de «escena y participación» para su proyecto de artistas llamado «Dame Cuartelillo» dentro de la extraordinaria programación de arte y cultura contemporánea que en ese periodo se realizaba en el renovado Centro Cultural Conde Duque en Madrid.
Desarrollé «De sol a Sol», un conjunto de cinco piezas para diferentes espacios del Conde Duque. El trabajo se llevaría a cabo durante las mañanas de un fin de semana. Lo que hice fue concebir un itinerario para grupos sucesivos de personas que, iniciándose en la explanada del Conde Duque, descenderían progresivamente hacia las bovedas interiores -impresionante lugar- y realizando experiencias de acción perceptiva, manipulación, dibujos con luz, escucha insólita de textos… experiencias de inmersión e interacción, unas veces proponiendo juego colectivo, otras de soledad y reflexión… Disfruté de un maravillosos equipo de colaboradores que hicieron posible la realización óptima de un proyecto, la verdad, bastante complejo. Durante todo el tiempo, en el patio del Cuartel yo realizaba la acción de «El Hombre que No Ve»: (Nuevo Intento de lograr un Propósito Imposible).
En el 2019, aparte del proyecto YACIMIENTO al que me referiré un poco más adelante, tuve el privilegio de ser invitado a participar con amigos de Nexodos en el proyecto PIC NIC, pequeñas obras con las que se inauguró el espacio Nexo990, en Monzón de Campos, en Palencia, idea de espacio destinado a proyectos de arte que partió de un antiguo deseo de Javier Ayarza y con el que el Ayuntamiento se ha volcado de un modo increíble y ejemplar. En pic nic, hice una pequeña obra, «Fotografías Fáciles de Hacer», en torno al acto fotográfico, más bien acerca de la mirada y de la percepción.
Y desde el espacio NEXO990, voy a cerrar estos comentarios sobre obras y proyectos de los últimos años con el trabajo GRITOS DE BARRO, LLAVES DE MEMORIA. inaugurado en julio de este año 2020.
Tiene su origen en unas acciones no públicas que realicé en Conde Duque y que más tarde desarrollé en el proyecto «Yacimiento, 12 Visiones» en Burgos. En esta ocasión lo he expandido a propósito de esta invitación a la exposición colectiva Tierra, Agua, Fuego. El resultado es una instalación con varios registros: acción participativa que dio lugar a microesculturas, proyección audiovisual e instalación de sonido interactivo. Lo primero fue una convocatoria a personas de Monzón de Campos, para realizar los «Gritos de barro». Esta acción pertenece a una serie que denomino genéricamente «Esculturas que usted mismo puede hacer». En este caso se trata de coger un pequeño trozo de arcilla en cada mano y apretarlo intensamente, hasta el extremo de que, si lo dejas salir, brota un grito genuino, intenso, desatado y profundo. Eso se registró para editarse posteriormente.
La pieza de barro que las personas hicieron y que pueden verse en la instalación, es en mi opinión una «llave de memoria» pues es exclusiva de quien la realiza, la huella de un acto vital que ninguna otra mano, en un acto posterior de reconectar podrá activar al no encajar con precisión, por no pertenecer.
LA CASA CROMÁTICA
Aparte de los trabajos más personales cuyo objetivo es siempre obtener experiencia de conocimiento y plus de vida, he venido desarrollando otras cosas, por decirlo de algún modo, como agente cultural. colaborando con instituciones y particulares en programaciones y en diseño de proyectos de cultura, arte y educación. Este tipo de actividades se engloban en la idea que denomino LA CASA CROMÁTICA, Proyectos de Desarrollo Creativo, y Artes en Colaboración. Un proyecto de arte educación, exposiciones peculiares, actividad editorial y práctica artística colaborativa.
En breve, a través de la web de LaCasaCromática, se podrá conocer, por ejemplo, el proyecto de Master del MEH que desde 2016 pusimos en marcha en colaboración con el Museo de la Evolución Humana de Burgos, dando cita a artistas de muy diferentes ámbitos y registros que fueron realizando breves seminarios y talleres de trabajo a partir de su experiencia vital y profesional para generar estímulo y conocimiento. También otros proyectos de caracter editorial, sónico, performativo o expositivo como, por ejemplo, el proyecto YACIMIENTO, también en colaboración con el MEH y la Fundación Atapuerca en el que 12 artistas fueron invitados a crear obra a partir de los Yacimientos de Atapuerca, resultado que permanece integrado en los espacios del CAREX, Centro de Arqueología Experimental, en Atapuerca.
«Caja de herramientas». Galería Aleskievich. París. 1992
«Las tres en raya. Viaje ilímite». Explorando el laberinto. Para Castille-Bastille. Aller Retour. Chapelle Saint Louise de la Salpétrière. París.1990
Desarrollando «Cabeza I». Proyecto de obra in situ A Ua Crag/ Kunst and Komplex. Rotterdam. 1993
CEADUNAS TIOMANA Libro-Objeto 22×17 cm. 80 pp. Cubierta extendida con solapas. 2003
LIBRO DE AVENTURAS/NOTAS BRUTAS Libro de artista. 72 capítulos. julio a septiembre 2013. 30×42 cm Un proceso de exploración en torno a Monzón de Campos.
PROPOSICIONAL. Proyecto de residencia en LAVA, Laboratorio de las Artes de Valladolid. 2014. Sala 221
Procesos individuales y sesiones participativas. Dos meses para explorar (resetear) el sistema creativo.
DE SOL A SOL- Cuatro experiencias de participación en torno a la luz y la sombra + una acción del Hombre que No Ve. Centro Cultural CondeDuque. Madrid. 2018
Quiero destacar que para la realización de este proyecto he contado con la ayuda fundamental de David Herguedas. Él es el experto en realizar la edición técnica de audio y vídeo y, sobre todo, en fabricar la electrónica del sistema de audio interactivo.
TEMPO. Cinco relatos audiovisuales sobre objetos que vibran u oscilan. Instalación. Huerto del Tertuliano. 2017
GRITOS DE BARRO-I _acción CondeDuque. 2018 GRITOS DE BARRO/LLAVES DE MEMORIA-II. Proyecto YACIMIENTO_12 VISIONES. CAREX. BURGOS. 2019
GRITOS DE BARRO/LLAVES DE MEMORIA-III. Acción participativa. Esculturas que usted mismo puede hacer. TIERRA, AGUA, FUEGO. Nexo990. Monzón de Campos. 2020
Alejandro Martínez Parra
Por Víctor del Río, 11/5/10
Alejandro Martínez Parra ha sido socio fundador e integrante de A Ua Crag durante todo el período de vigencia del proyecto colectivo, esto es, entre 1985 y 1996, y ha continuado desarrollando hasta la actualidad su obra en alternancia con el trabajo de diseñador gráfico, editorial y de exposiciones. En cuanto a la actividad artística podemos decir que aparece como un trabajo integrado normalmente en proyectos colectivos, en ocasiones invisibilizado por su propia renuncia a asumir un protagonismo artístico o por una suerte de retirada silenciosa que pone en marcha la búsqueda de una complicidad poética con otros creadores. Entre los rasgos distintivos de su obra podríamos apuntar una atención recurrente a los juegos de conversión sinestésica entre diversos campos perceptivos y cognitivos. Su obra ha estado ubicada en el cruce de caminos entre la vertiente escénica y performativa y sus intereses en la creación sonora más allá de las disciplinas musicales convencionales. Del mismo modo, algunas de sus creaciones se sitúan también entre lo poético y lo visual. Su exploración estética bucea en el cambio y la sorpresa sobre lo esperado, en la ruptura de las expectativas. Sus proyectos han explorado el juego sensorial, la sustitución del oído por la vista, o abordan la tactilidad de los objetos y el comportamiento del cuerpo del espectador y el actor. Esta búsqueda le lleva a una trayectoria que muestra declarados vínculos con la poesía visual de Francisco Pino, entre otros, en el contexto de la creación literaria; o con la obra de Esther Ferrer e Isidoro Valcárcel Medina, con quienes mantiene contacto personal a raíz de su paso por París y Madrid respectivamente.
En 1981 participa del grupo CORPS creado en Canarias por Pedro Garhel con Rosa Galindo, un grupo que se trasladará a Madrid y al que, progresivamente, bajo la dirección de Garhel se incorporan más creadores y en el que Alejandro Martínez Parra se inicia en el repertorio escénico. La actividad colectiva se completaría con otras colaboraciones como las que tienen lugar en la Sala Rock-ola en torno a “Opereta Rock”, un espectáculo entre la performance, la danza y el teatro no convencional y “Cuatro noches en la luna”, que se concebía como cuatro proyectos desplegados específicamente para otro local de la Calle Luna de Madrid. En estos eventos, en los que la personalidad de Pedro Garhel tiene una importancia decisiva como creador de atmósferas colaborativas, Alejandro Martínez Parra lleva a cabo acciones liberadas de cualquier disciplina bajo fórmulas ritualistas y eclécticas donde se daba cabida a la experimentación espontánea y a la improvisación. Éste sería el contexto en el que nace el Espacio P, fundado por Pedro Garhel en el local de la Calle Núñez de Arce, y que estaría destinado a convertirse en uno de los principales y menos estudiados espacios alternativos en el Madrid de los 80. De nuevo Alejandro Martínez Parra colabora en este proyecto colectivo diluyendo sus propuestas en el contexto de prácticas performativas grupales.
En 1983 dos proyectos colectivos vuelven a situar la obra de Alejandro Martínez Parra en los orígenes de nuevos proyectos de colaboración, uno será 8 + 8 Madrid – Aranda que constituye una tentativa anticipadora de la fundación de A Ua Crag además de un intercambio entre varios artistas, algunos de ellos serían decisivos en la formación poco después del colectivo arandino. El proyecto era una invitación a ocho artistas que desarrollaban su trabajo en Madrid para participar durante una semana en un proceso de creación en Aranda de Duero, entre los artistas invitados se encontraban Isidro Parra, Miguel Mansanet, Victoria Encinas y Pedro Garhel.. El otro proyecto será Poisson Soluble, un espacio en Madrid coordinado por Victoria Encinas que trataba de incorporar claves conceptuales a la exposición colectiva. Tal como ha relatado el propio Alejandro Martínez Parra: «Victoria me invitó a participar y como coincidió con el servicio militar decidimos la “originalidad” de hacerlo de la siguiente forma: por carta. Yo le iría dando instrucciones y ella haría la pieza. Me encantaría encontrar esas cartas y algo sobre lo que hicimos, pero no recuerdo más que utilicé sardinas y arenques. Cosa que hice al año siguiente en A Ua Crag en el que, probablemente, fue el trabajo con el que me inicié (de iniciación) lo que ya certificó mi salida de la “juventud artística”: Arqueológicas».
Su período de mayor actividad artística se sitúa en los años de andadura de A Ua Crag, y, en efecto, el primero de sus proyectos individuales se presenta bajo el título Arqueológicas. Proyecto en tres fases, en 1985. Entre los montajes individuales que destacan en el contexto del colectivo de Aranda habría que mencionar en 1987 Acciones del ciego, e Inédito viaje, de 1991. Más tarde también destacan Pieza para MDF. Investigación sobre el caso nº1, en la galería Cruce de Madrid en 1994, con Isidoro Valcárcel como director de la “investigación” y de otras siete personas como ayudantes y “testigos”. y Pensamiento en el acto, del mismo año, que formaba parte de la aportación para el último de los intercambios internacionales de A Ua Crag, esta vez en Québec, Canadá.
Entre 1988 y 2000 mantiene junto a Rafael Lamata el grupo de acción y performance La constructora -12 y que nace en el contexto de la actividad de A Ua Crag. Los frutos de estas colaboraciones situaban su trabajo en el plano de la producción de acontecimientos en el espacio urbano y en el juego con la negación del peso de la visualidad para dar protagonismo a los aspectos de verbalización y a juegos sobre el comportamiento.
Por lo que respecta a su aproximación a la poesía visual podemos encontrar nuevas propuestas en la producción de autoediciones de algunos libros de difusión limitada como CEADUNAS TIOMANA, una obra publicada bajo el sello editorial OMOOWO ediciones. En ellos el juego con la tipografía y los recursos ofrecidos por el diseño gráfico cooperan en un nuevo producto de carácter híbrido entre lo visual y lo poético. En este camino Alejandro Martínez Parra ha seguido produciendo una obra que discurre ajena al ruido de la escena artística nacional y a los contextos de exhibición habituales. Su retirada del espacio de visibilidad pública parece formar parte de una estrategia poética que se va desgranando en pequeños proyectos y en una obra sedimentada en el tiempo y en una voluntaria condición efímera.
Victor del Río. 2010